En control que se hicieron sobre 19 vehículos, 14 no lograron pasar la prueba y esto motivara a la agencia responsable a tomar la medida preventiva sobre todas las unidades –dijo Esteban Fernandez, gerente comercial del grupo.
De los 15 revisados, 11 carros Chevrolet Suburban o Tahoe fueron comprados a la agencia distribuidora y los restantes cuatro fueron adquiridos por otras vías. Aún restan cuatro vehículos por atender, añadió el ejecutivo.
Detalles. Fernández señaló que la llamada de acción preventiva (más conocida en inglés como recall) para los modelos en Costa Rica fue ordenada por la casa fabricante en Estados Unidos.
Desde entonces, Grupo Q se dio a la tarea de contactar a los propietarios de los vehículos que salieron de la agencia, para la remoción del módulo de manera gratuita.
Y a aquellos que no se vendieron ahí, la empresa les quita también el dispositivo sin costo alguno.
“Es un compromiso de la fábrica de atender este tema con agilidad y responsabilidad, porque es consciente de las consecuencias que puede tener el no tomar acciones”, dijo Fernández.
El ejecutivo agregó que el fabricante de Chevrolet valoró que el módulo de los modelos Tahoe y Suburban (2007-2009) “podría potencialmente generar circuito”.
Hasta la fecha no se han presentado problemas como el mencionado, apuntó Fernández.
Como parte de la llamada de acción preventiva, Grupo Q extiende un vale por un monto de $100, que puede ser utilizado en compras en la agencia, ya sea en refacciones, accesorios o servicio de mantenimiento.
Antes de este recall, Purdy Motor hizo uno en febrero con cinco carros Tundra y luego Faco con 37 Accord. Se trataba de ajustes en pedal de acelerador y airbags.
Via: la nación
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